Salida de Madrid rumbo a la bella localidad de Olite, antigua capital de la Corte y Reino en tiempos de Carlos III y su nieto el Príncipe de Viana, siendo hoy uno de los principales centros vitivinícolas de la región. Su portentosa muralla - QUE DATA DEL SIGLO I - encierra un interesante paseo monumental por el recinto romano y la ampliación medieval (A PARTIR DE A CONCESIÓN DEL FUERO DE ESTELLA EN 1147), que da la actual fisonomía a la ciudad y a sus más importantes monumentos. que data del siglo I, tiempo en el que los romanos construyeron un recinto amurallado. De la muralla romana tan solo quedan algunas torres y muro, de la medieval la Torre del Chapitel o del reloj y los cuatro portales. En la ciudad destaca el Castillo-Palacio de Olite, Monumento Nacional desde 1925, antigua corte de los Reyes navarros establecida en uno de los castillos medievales más lujosos de Europa, construido sobre una fortaleza del S.XIII. En su peculiar configuración se palpa la influencia de la arquitectura francesa y de la decoración mudéjar. De esto se encargó, en el S.XV, el rey Carlos III «el Noble», quien hizo que los maestros artesanos encargados de la obra viajaran con él a Francia y a Castilla para contemplar los palacios más espléndidos del momento. No hay que olvidar la Iglesia de Santa María la Real, unida al castillo, ejemplo delicadísimo del gótico en Navarra en cuyo interior se celebraban las ceremonias más solemnes de la corte. Precedida por un original atrio exento de arquerías góticas, en su fachada se observa la influencia de los talleres parisinos. Otro de sus elementos destacados es el gran rosetón del segundo arco ojival. Sus coloridos mosaicos forman patrones abstractos y geométricos que podrás apreciar mejor al entrar en la nave. En el interior, destacan un retablo renacentista presidido por una talla gótica de la Virgen y una imagen del Cristo de la Buena Muerte, en el que se perciben el influjo de las pintura flamenca e italiana. Almuerzo. Por la tarde visitaremos la capital y ciudad más gran-de de Navarra, Pamplona. Famosa por los San Fermines, una de las fiestas más conocidas a nivel mundial, la ciudad cuenta con un casco histórico precioso, de trazado medieval, calles pintorescas y estrechísimas, balcones de madera ,etc. Su recogido casco antiguo se desarrolla en torno a la Plaza del Castillo y la Catedral de Santa María. Estuvo rodeado por una muralla, del siglo XVI, conservadas prácticamente intactas. Se pueden distinguir en él tres burgos distintos que se unifica-ron en 1423 gracias al Privilegio de la Unión. Por una parte está el de San Cernin, entre las calles de Santo Domingo y Nueva. Después el de Navarrería, desde Chapitela hasta Mañueta, y por último el de San Nicolás. Sobre la antigua ciudad romana se desarrolla un atractivo entramado urbano que engloba bellos edificios: Museo de Navarra, Palacio de Cuentas, antiguo tribunal de cuentas del Reino de Navarra, aún en activo y único edificio del gótico civil de la ciudad; Ayuntamiento (desde donde se lanza el famoso chupinazo); Palacio Indiano Navarro Tafalla; Plaza del Castillo, Café Iruña. Cerca se encuentra la Iglesia de San Lorenzo, con la capilla dedicada al Patrono de la ciudad y al lado, los Jardines de la Taconera, las murallas y la ciudadela del siglo XVI, construida a imitación de la de Amberes. Mención especial merece la Catedral de Santa María, de estilo gótico, con uno de los mejores claustros europeos. Es recomendable no perderse un paseo por las calles que recorre el encierro (muy cercanas a nuestro hotel), y que inmortalizara Hemmingway: Estafeta, Santo Domingo, etc. Esta zona es la de los chiquitos, restaurantes y reunión de los pamplonicas. Cena libre y alojamiento.
Desayuno. Hoy nos toca conocer algunos de los lugares más emblemáticos de la historia de Navarra. Comenzaremos por la localidad de San Martín de Unx, pueblo de empinadas calles, casas de piedra y templos en elegante estilo románico, y si te alejas un poco descubrirás su armoniosa silueta sobre los viñedos, de los que sus habitantes extraen desde tiempos lejanos el más afamado de sus productos, el vino rosado. El recorrido nos lleva hasta la iglesia de San Martín, templo consagrado en 1156 y donde además de la cripta, destaca el elegante ábside, una pila bautismal románica labrada en piedra del siglo XII y la escultura de un Cristo yacente del siglo XVIII. Seguiremos nuestro camino hacia Ujué, uno de esos lugares con encanto de España, un pequeño pueblo medieval de callejuelas empedradas, encaramado a la montaña que se encuentra coronado por un imponente templo con aspecto de fortaleza: la Iglesia de Santa María, que le da al lugar un atractivo especial que enamora a primera vista. Por todo ello, la localidad fue nombrada como uno de Los Pueblos más bonitos de España en el año 2017. Todas las calles nos conducen a la parte más alta donde se encuentra la iglesia con aspecto de fortaleza, ya que la localidad fue el principal baluarte del reino de Pamplona que defendían sus tierras de los musulmanes. El templo original se construyó entre los siglos XI y XII, pero el que vemos en la actualidad se hizo en varias etapas gracias a las aportaciones de diferentes reyes. Ujué es un pueblo de piedra que creció al abrigo de la iglesia-fortaleza y que se desparrama en fuertes pendientes por su ladera sur. Callejear entre sus casas y atravesar sus pasadizos es casi una obligación después de visitar el santuario. Continuamos camino hacia la cercana localidad de Sangüesa, situada en un entorno natural privilegiado entre las primeras sierras pirenaicas y el rio Aragón, etapa importante del Camino de Santiago pro-cedente del Puerto de Somport y Jaca, el conocido como Camino Aragonés. Almuerzo. Capital de merindad y nudo histórico de comunicaciones, fue ciudad romana y marca fronteriza frente al Islam. Hoy posee uno de los Patrimonios Artísticos más completos de Navarra La gran joya de Sangüesa es la portada románica de Santa María la Real, cumbre de la escultura románica, de finales del siglo XII, una de las obras más importantes de su estilo. Verdadero retablo en piedra, presenta un conjunto abigarrado de elementos. Para la realización de la misma intervinieron en ella dos maestros reconocidos: el de San Juan de la Peña que trabaja la parte superior y Leodegarius al que se le atribuye la inferior. La población posee otras joyas de interés: la iglesia de Santiago, la Iglesia del Salvador o el Palacio de Vallesantoro. Continuamos por una pintoresca carretera hacia el MONASTERIO DE LEYRE, situado en la impresionante Sierra de Leyre y sobre el pantano de Yesa. Comenzó a construirse en el siglo XI en estilo románico, para terminarse a finales del siglo XV con la nave gótica de la iglesia. En él están enterrados los primeros reyes del Navarra. Dos son los elementos más relevantes del monasterio: por una parte, su privilegiada situación; por otra, las construcciones que lo componen, al ser algunas de ellas los ejemplares de románico más antiguos de Navarra. Así, en su iglesia, en particular en la cabecera y en la cripta, se aprecia un románico primitivo. El estado de conservación de estos edificios es muy bueno, aunque el mobiliario se ha perdido en el transcurso del tiempo. En Leyre destaca la calidad de la piedra dorada proveniente de canteras propias que se hallaban en las cercanías del monasterio, en plena Sierra. Tras la visita, regresamos a PAMPLONA. Cena libre y alojamiento.
Desayuno. Nuestro recorrido de hoy nos llevará a conocer alguno de los paisajes más impresionantes de España. Historia y paisaje se unen para ofrecernos una jornada única. Nuestra mañana empezará conociendo RONCESVALLES, es, con toda seguridad, uno de los lugares más emblemáticos del Occidente europeo, en cuyas dilatadas fronteras se consideró siempre el hito más relavante y entrañable de la ruta compostelana. Esta localidad fue, y sigue siendo, un enclave fundamental para los peregrinos de la ruta que encuentran aquí numerosas instituciones religiosas dedicadas a su atención tras el siempre difícil paso de los montes Pirineos entre Francia y España. Subiremos hasta el Alto de Ibañeta, donde tuvo lugar la Batalla de Roncesvalles y con todos aquellos que se animen, haremos el descenso a pie hasta la Colegiata (y si no llueve!). Seguiremos disfrutando de la naturaleza dentro ya de la Selva de Irati, una masa compacta de árboles de 17.000 hectáreas, que lo convierten en el hayedo-abetal más extenso de Europa. En un extraordinario estado de conservación. Continuamos ruta hacia el VALLE DEL SALAZAR por carreteras pintorescas en una naturaleza desbordante. Llegamos a OCHAGAVÍA, uno de los pueblos más bellos de Navarra, de visita casi obligada, por sus hermosas casas, su puente de piedra sobre el río Sala-zar y la ermita de Nuestra Señora de Muskilda, en la cima de un monte con una amplia panorámica de los picos del Pirineo. Pasear y perderse por las empinadas y empedradas calles es la mejor forma de conocer Ochagavía. En su escudo aparece un lobo que nos recuerda el nombre de la villa que en euskera, Otsagabia (Otsoen habia), significa nido de lobos. Las casas son de piedra con tejados muy inclinados a dos o cuatro aguas, separadas unas de otras por un espacio llamado "etxekarte”. Destacan los palacios medievales de Urrutia, Iriarte y Donamaría, y algunas casas blasonadas de los siglos XVIII y XIX. Almuerzo. Después de comer nos dirigiremos hacia Foz de Arbaiun, un tesoro escondido en las mismísimas entrañas de Navarra. Extraordinario farallón calizo que guarda una importante reserva natural de aves rapaces. Desde el mirador podremos disfrutar de unas vistas espectaculares antes de regresar a PAMPLONA. Cena libre y alojamiento. Un auténtico vergel difícil de imaginar dada su ubicación. Una estrecha garganta hogar de aves rapa-ces y excavada con precisión por el curso del famoso río Irati. Regreso Pamplona. CENA LIBRE y alojamiento.
Desayuno. Hoy para despedirnos de las tierras navarras, recorreremos parte del Camino de Santiago que discurre por estas tierras. Nos dirigimos hacia SANTA MARIA DE EUNATE, originalísima construcción octogonal del siglo XII, cuyo origen y destino permanecen sin resolver. Entre la leyenda y el mito, quizás fuera una capilla funeraria de la Orden del Temple, o tal vez un hospital de peregrinos. Muy cerca se encuentra PUENTE LA REINA, lugar donde confluyen las ramas francesas de la RUTA JACOBEA. La tradición dice que el nombre proviene del puente románico sobre el río Arga, que fue mandado construir en el siglo XI por una anónima reina de Navarra. General-mente se hace referencia a que esta reina fue Muniadona de Castilla, esposa de Sancho el Mayor o Estefanía, la esposa del rey García el de Nájera. Pronto se enriqueció económica y culturalmente. Muestra de ello es la Iglesia del Crucifijo tardorrománica construida por los templarios a mitad del siglo XII. La calle Mayor es calle y arte a la vez: arquitectura popular con casas blasonadas, palacios, comercios de artesanos. Allí se encuentra la iglesia de Santiago el Mayor, de final del siglo XII y reconstruida en el XV, muestra su portada romana y las tallas góticas de San Bartolomé y de Santiago Beltza. "Y desde aquí todos los caminos a Santiago se hacen uno solo". Continuamos nuestro viaje hacia ESTELLA, una de las más bellas ciudades navarras. Refleja su rico pasado materializado en sus singulares monumentos medievales: la Iglesia de San Pedro de Rúa, la Iglesia de San Miguel o el Palacio de los Reyes de Navarra (uno de los escasos exponentes del románico civil de la región). Por este importante patrimonio monumental, también es conocida como la Tole-do del norte. Almuerzo. Tras la comida, iniciamos nuestro regreso a Madrid. Llegada a última hora de la tarde. FIN DEL VIAJE Y DE NUESTROS SERVICIOS.